Soporte para tartas {Cake stand} - DIY

Este fin de semana tengo que:
- poner la decoración navideña en casa lo que va a representar un caos de bolas y unas disputas interminables acerca de quién corona el árbol con la estrella.
- hacer un disfraz para el festival de navidad del colegio de la pequeña que va de niño africano... dónde están los pastores con tambor de toda la vida? En fin, viva la globalización oiga.
- hacer la careta para el disfraz anterior, que ahora que caigo, qué poca gracia me hace el hecho de que cuando mi mini-africana de 2 años salga a cantar y bailar no le voy a ver la cara! Voy a grabar en vídeo un plato de cartón pintado con témpera marrón... me niego! Me apunto mentalmente hablar de esto tan serio con la profe. No es porque me dé miedo no reconocerla, porque esos andares tan garbosos y esas patitas bailonas las reconocería entre un millón, pero quiero verle la cara. Es mi mini-cara y quiero verla. Punto.
- hacer una figurita para el belén de la clase de la mayor con un bote de actimel  (dios, los botes de actimel  son el artilugio más versátil del mundo desde la invención del tetra-pack) alucino con ésta lámpara.
- hacer las cosas normales de un fin de semana en familia: comidas, camas, paseos, bañeras...
Así que, para los que tengáis algo más de tiempo libre, os dejo este DIY que es de lo más resultón que he hecho últimamente.

Me encantan los platos soporte para tartas o cake stands  que es como los llaman ahora (vamos, lo que viene siendo lo mismo pero en inglé) pero me parecen carísimos. Igual no lo son realmente para lo que aportan de sofisticación a las tartas presentadas en ellos, pero yo me veo incapaz de gastarme entre 40 y 50 eur en uno. Y además algunos de cristal que he visto que son algo más baratos eran de un cristal muy mal trabajado, con burbujas y sombras. Así que investigando un poco he visto ideas por ahí que me han inspirado para hacer éste. Un plato de plástico duro y un candelabro han hecho la magia.
Me gusta porque la idea puede adaptarse de mil formas. Sólo hay que buscar algo que sirva de pie y tenga la superficie suficiente para adherirse bien a la parte que haga las veces de plato. A partir de ahí, imaginación al poder. Los bazares de "los chinos"  son auténticas minas para estas cosas.
Otras posibilidades podrían ser:
1. Un plato de madera, como los de servir el pulpo a feira puesto boca abajo sobre un candelabro, o sobre una tacita pequeña colocada del revés, o un vasito mono de esos de té moruno
2. Un molde metálico de los de tipo quiche que tiene el borde rizado, puesto boca abajo sobre el pie, que de nuevo puede ser una de las opciones anteriores.
3. Algo cuadrado como un trozo de pizarra de los que están ahora de moda para servir. En este caso la pizarra no habría ni que pintarla.
4. cualquiera de estas opciones se puede adornar pegando encima del plato de turno algún adorno.
En fin, os doy ideas y a ver si hacéis alguna y me contáis qué os ha salido. En mi caso la opción 1 y la 3 van a caer seguro. Ya os las enseñaré.

En cuanto a precios, pues es MUY asequible. Me ha costado 2,25 eur el plato y creo recordar que 1,85 eur el candelabro pequeño. Lo más caro en mi caso ha sido la pintura porque es Chalk Paint  de Annie Sloan  pero no es necesario usarla de este tipo, vale cualquier otra. Yo la he usado porque la compré para otras cosas que quería pintar en casa y como aún no me he puesto me moría de ganas por utilizar este tono de azul que me parece precioso. Pero vamos, que cualquier pintura acrílica de manualidades (como la que usé para pintar estas cucharas de madera) o incluso pintura en spray (como la que usé para esta bandeja decorada) sirve para hacerlo y son muy económicas y se encuentran también en los chinos.
Bueno, vamos con los pasos que he seguido para hacer este modelo.
Se necesita:

• un plato de plástico
• un candelabro pequeño 
• pintura y pincel
• pegamento (yo he usado el pegamento caliente de pistola pero cualquier cola o pegamento de contacto que pegue bien servirá, o un Superglue  de toda la vida)

Pasos a seguir:

1. Limpia bien de polvo todos los elementos antes de empezar.
2. Pinta como más te guste el plato y el pie. En mi caso le he dado varias capas a ambas cosas. En el caso del plato me gustaba que se viera la textura de brochazo para que tuviera un aspecto más artesanal así que le di bastantes capas de pintura azul y luego adorné las bolitas del borde del plato con la pintura blanca. Deja secar bien.
3. Pega el pie en el centro del plato y ponle algo de peso encima durante al menos 24h para que se adhiera bien. Y ya lo tienes.

Cosas a tener en cuenta:
- ¡IMPORTANTE! Dependiendo de la pintura que uses el contacto con la comida puede no ser del todo aconsejable, por ejemplo, con la pintura en spray yo no pondría la comida directamente encima, en estos casos, colocas la típica rodela de repostería o una servilleta mona y ya está. Usando una pintura que sepamos seguro que es NO TÓXICA, este asunto está resuelto. Pero vamos, que con la rodela o la servilleta mona también está resuelto.
- No dejéis de visitar los bazares chinos al menos una vez a la semana. Para mí es una obligación, es como ir a hacerse un chequeo de salud de vez en cuando. Obligatorio. Eso sí, hay que ir preparados porque la canción "terror en el hipermercado" me viene a la cabeza cada vez que estoy curioseando los pasillos y percibo la presencia de un chino con cara de pocos amigos siguiéndome sigiloso por el pasillo paralelo mientras me vigila entre las cucharas de madera colgadas; Nunca sé si lo hace para que no le robe o porque va a saltar sobre mí para atacarme al llegar a la zona de los rollos de papel film de 500.000 metros y va a retractilarme y venderme como una figurita de adorno.

Ayayayayayayayay que me perdí el capítulo de la saga en la que hacen jedi a Han Solo