No sé qué extraño código había en mis palabras que ha convertido a mis dos angelitos en unos monstruos a los que he tenido que tapar la boca con las manos mientras se carcajeaban a cual más y mejor. En un momento parecía que en vez de ser una familia respetable en un restaurante estábamos comiendo con Bob Esponja y Patricio.
Desde que han superado sus diferencias basadas en hermana pequeña reina de l mambo -- hermana mayor no comprende qué cómo ni cuándo, están de lo más amiguitas, y yo ahora mismo no sé qué es peor. Cuando les entra la alegría de vivir todo pasa por hablar de aguas mayores y de gases nobles. Y la cosa hay veces que se pone mucho peor porque la más pequeña que ahora tiene tres años, está en esa difícil fase de la que somos 100% culpables los adultos en la que de pronto le decimos que tirarse pedos no es gracioso.
¿Cómo que NO es gracioso? parece que te dice mientras se tira uno y te mira sonriente como esperando a que aplaudas. Pero si cuando era bebé, el hecho de que expulsara un gasecillo era motivo de llamar a toda la familia. Si llevas 3 años riéndote y dando palmas cada vez que se me ha escapado un pun. ¿Cómo me dices ahora que eso no se hace? ¡Ahora que soy capaz de tirármelos cuando quiero! Será corta-rollos mi madre... Y mientras tanto tienes a la hermana mayor, que ya ha pasado por la re-educación y que muestra cierto pudor en estos menesteres, muriéndose de la risa y animando a la pequeña como intentando vivir a través de la otra sus ansias de rebeldía pedorra.
En fin, que os cuento yo esto porque me tiene preocupada el tema. Que sí, que sé que todo pasa y que al final aprenden, y que todo el mundo te dice lo mismo "cuántos adultos has visto que no coman solos", pero claro, nadie te tranquiliza diciéndote "no te preocupes mujer, que no se va a estar tirando pedos en público hasta selectividad". Y paro ya de hablar de este tema porque esto es un blog de comida. Bueno, es mi blog y hablo de mis cosas, y mis cosas esta semana ha coincidido que son éstas. Se siente. Y ahora no os hagáis los finos a ver quién es el que no se ha tirado nunca un pun.
Y ahora a la receta. He preparado ya un par de veces estas barritas de cereales y están buenísimas. Son una combinación de diferentes recetas que he visto por ahí. Por lo que he podido aprender investigando la blogosfera cerealística, hay dos formas básicas de hacer este tipo de barritas: horneadas o sin hornear. Horneándolas se obtiene una barrita muy crujiente. Y cuando digo MUY es que es, para mi gusto, hasta dura. Lo probé y no me convenció. La otra forma, que es la que yo he empleado para hacer éstas, simplemente amalgama los ingredientes y luego los compacta y los refrigera.
Otra variación que podéis encontrar es la que atañe a los ingredientes que se usan para que los cereales se compacten entre sí. Hay la versión que utiliza aceites, que normalmente son vegetales de tipo palma y cosas así que no me gustan nada. Y hay otro tipo que utiliza una mezcla de miel, melazas, o siropes. La que yo he usado es esta última opción.
Por último, una cosa que sí me gusta del hecho de hornear es el sabor a tostadito que toman los cereales. Para conseguirlo he tostado ligeramente los cereales antes de hacer la mezcla. Vamos con la receta que es muy fácil y os lo cuento todo con detalle.
Ingredientes
- 90 grs de arroz inflado (krispis)
- 40 grs de arroz inflado chocolateado (choco krispis)
- 60 grs de copos de avena
- 60 grs de nueces peladas y troceadas con el cuchillo
- 100 grs de miel
- 20 grs de sirope de arce (opcional)
- 60 grs de mantequilla
- 60 grs de azúcar moreno
- 50 grs de pepitas de chocolate
- Mientras vas midiendo y pesando todos los ingredientes precalienta el horno a 180 grs y prepara una bandeja de horno con papel sulfurizado
- Esparce bien extendidos los cereales (arroces inflados y avena) y las nueces en la bandeja del horno y cuando esté caliente tuéstalos durante unos 10 min. Remuévelos un poco pasados 5 min. Olerás que empieza a notarse el aroma de los cereales ligeramente tostados. Es justo el aroma que queremos conseguir sin necesidad de tostar las barritas horneándolas después porque se quedan muy duras.
- Cuando estén, vuelca todos los cereales en un bol grande y reserva.
- Prepara una fuente rectangular o cuadrada, o un molde y fórralo con papel de aluminio.
- En un cazo por a fuego medio-bajo la mantequilla, la miel, el azúcar y el sirope de arce. Remueve hasta que el azúcar esté prácticamente disuelto y no te encuentres ya los granillos de azúcar pero con cuidado de que no se queme ni se solidifique.
- Vierte esta mezcla sobre los cereales y con una espátula remueve bien, enérgicamente, para que toda la mezcla de cereales se pringue bien del "pegamento".
- Cuando esté bien distribuido el "pegamento", vamos poniendo la mezcla en la fuente del horno que hemos forrado con papel de aluminio y vamos aplastando y compactando muy bien a medida que extendemos. Es importante compactar muy muy bien, es lo que hará que las barritas no se desmoronen cuando las cortemos después. Así que aplastamos fuerte. En este punto es importante también ir observando el grosor de la barrita. Si nuestro molde es muy pequeño, quedarán demasiado gruesas, por lo que yo dividiría la mezcla en dos moldes. Si el molde es muy grande, quedarán demasiado finas, entonces yo lo que haría sería concentrar toda la mezcla en la mitad del molde. Eso tenéis que ir viéndolo sobre la marcha. A mí la primera vez que hice esta receta me salieron muy gruesas y esta vez para conseguir el grosor de barritas que veis en las fotos tuve que dejar fuera del molde parte de la mezcla que compacté en un moldecito pequeño a parte.
- Ahora es el momento de esparcir las pepitas de chocolate por encima y aplastarlas bien para que se incrusten. No las echamos antes porque se derretirían con el calor. Si no os importa que la mezcla quede un poco teñida de chocolate un poco fundido, podéis echar unas pocas pepitas a la vez que removéis bien en el bol antes de rellenar el molde y dejar otras para el final. Eso ya va en gustos.
- Dejáis enfriar completamente y luego lo metéis en el frigorífico una hora.
- Pasada la hora, lo sacáis del molde ayudándoos del papel de aluminio y cortáis las barritas con un cuchillo bien afilado del tamaño que más os guste.
- Son una opción de comida para el recreo o de merienda muy socorrido. Yo me lo como también en la oficina a media mañana.
- los cereales que empleo son los que yo tenía a mano y los que nos gustan en casa, pero puedes ponerles los que te gusten más, esto realmente es un ejercicio de imaginación al poder.
- Lo mismo ocurre con los frutos secos, yo le puse nueces porque es lo que tenía, pero avellanas, almendras, pipas, frutos deshidratados como pasas, arándanos, orejones, ciruelas, fresas... También plátano deshidratado creo que le puede ir fenomenal, tengo pendiente probarlo.
- El sirope de arce es totalmente opcional, yo lo tengo y le pongo un poco, pero con la miel, la mantequilla y el azúcar creo que es más que suficiente. Igual que si quieres ponerle esencia de vainilla que creo que también puede irle bien. Todas estas cosas van por gustos y esta receta es adaptable 100%.
- Con un envoltorio mono se lo llevan al cole la mar de felices.
Siempre lo he sabido, mi niña es una princesa, pero de las de verdad. |
Pues qué te voy a decir...que estoy en una etapa similar, a un paso de Bob Esponja y Patricio...y que en el momento en que los peques se ponen en "modo cómplice", no hay quien los pare!!!
ResponderEliminarPor supuesto que me apunto la receta!! tengo q conseguirme una báscula para calcular bien los pesos... Ya te contaré!!
besitos!
Flor
Flor guapa, muchas gracias. Me consuela saber que no soy la única que vive en una piña debajo del mar...
EliminarBesitos
Jajajajaja!
ResponderEliminarYo no tengo niños, así que no me he visto nunca en una de esas... pero tranquila, no va a estar tirándose pedos hasta la universidad, eso ya te lo digo yo, al menos no en público
:D
Ana Melm jaja, qué me vas a decir... Pero te creo. Es sólo que a veces parece que no lo van a conseguir. Jajaja.
EliminarBesitos.
Que viva la naturaleza jajaja. Yo hago barritas en casa por que mis favoritas que son las especial K de chocolate negro no existen en Londres, así que es una receta que recomiendo 100% un abrazo
ResponderEliminarPues no sé yo cuáles son las special K de choco, las voy a buscar en el súper a ver qué llevan y cómo son. Besitos!
EliminarMadre mía, leyéndote ya me estoy imaginando lo que me espera de aquí a un par de años, que el monstruito de la casa cumple esta semana un añito!
ResponderEliminarEso si, como de momento no me ha pasado, me he reído de lo lindo con la situación, todo hay que decirlo!
Estas barritas me las llevo, que también llevo tiempo buscando una receta que me convenza, y la tuya lo ha conseguido! Todas las que había visto eran con horno, pero como a tí, los ingredientes no me llamaban demasiado, así que te voy a copiar, jeje!
Un besote, y ánimo con tus princesitas!
Un añito ya! Qué ilusión hace a que sí? Son muy ricos, pero tienen sus fases. Y la fase cacaculopedopis la mía mayor no la tuvo tan acusada así que con la peque es una lucha!
EliminarSi pruebas las barritas me dices!
Besitos y felicidades a mini-pumuky!!
Jajajaja!!! qué razón tienes!!! Aquí es igual...y si con dos es una locura, con tres peyéndose uno tras otro y partiéndose la caja, pues ya ni te cuento, jajaja. Pero qué les voy a decir yo, si yo también encuentro los pedos desternillantes, pues me descojono también mientras mi marido me mira con los ojos que se le van a salir de las cuencas como diciendo: "Pero tú qué edad tienes pedazo de loca???? No te rias que al final estos se tiran un pedo hasta en las barbas del Papa!!!!". Pero qué se le va a hacer, la familia que le ha tocado es la que le ha tocado, jajaja.
ResponderEliminarVentosidades aparte, las barritas tienen una pinta tremenda. Mi marido es fan total, así que las probaré (aunque que conste que le dan gases, jajaja).
♥
No puedo de la risa Maca tía. Me encanta la palabra "peyéndose". Jajaja. Yo te digo que lo del concurso de pedos es lo que más les podría motivar ahora mismo a las mías. Y veo que a los tuyos igual. Pues nada, nos ponemos de jurado y nos partimos la caja nosotras también. Jajaja.
EliminarSi tu marido ha leído lo de los gases, te mata.
Eres genial!
Jajaja, está en Roma, así que no se ha enterado, jajaja.
ResponderEliminarlo que me he podido reir esta tarde con mi hija la mayor y tu post. Se lo he leido porque sabía que se iba a morir de la risa. Effectivamente, se parte el culo y me suelta: "¿Alguien sabe lo que es un pun? PRRRRRRRRRR, esto, jajajaja". Vamos, la cereza del pastel, jajaja.
jaja que risas!!! Me e sentido muy identificada .... tengo un peke de 3 años y es el mismo caso, mamiii pum .. y yo .. echaste un pum mi vida ? si, dice ( todos) muy bieeeen!! fiestooon!! (aplausos varios) tsss la leche :)
ResponderEliminarSiguiendo un poco el hilo, te has preguntado alguna vez cuantos nombres se le pueden poner a los pum? por mi casa es pum, pedo, perrete, perretus jiji jojo :) Bueno y centrémonos jejeje y
yendo a la receta.... unas barritas fabulosas, nada que ver con las que se venden por ahi.
Bicos guapa.
Jajajajajajaja!! Es la primera vez que comento y sé que debería empezar por un saludo, (y aprovecho: ¡HOLA! ) pero es que me he reído mucho. Te he conocido gracias al reto de FoodbloggerTrotamundos y estoy encantada. Ya leí tu receta de Mac&Cheese y me pareció fantástica. Ah! Ese cuento también está por casa y añado Caca, culo, pedo, PIS! jajaja
ResponderEliminarUn saludo
Por cierto, qué despiste soy, me han gustado muchísimos las barritas de cereales!
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