Brioche esculpido {de Valentina Zurkan}

"Lunes antes de almorzar, una niña fue a jugar, pero no pudo jugar porque tenía que barrer. Martes antes de almorzar, una niña fue a jugar, pero no pudo jugar porque tenía que planchar. Miércoles antes de almorzar, una niña fue a jugar, pero no pudo jugar porque tenía que coser..." Y así sigue. Y lo peor no es que la niña sea el alter ego de la Cenicienta, ni que no pueda jugar. Lo peor es que son días de diario y es por la mañana y la niña ¡no va al colegio! Jolín, Miliki, que te pasaste media vida en Cuba y allí los niños no comerán pero al colegio van todos desde bien pequeñitos. Te perdono porque he pasado grandes momentos gracias a tu gallina TuruleTA. ¿Qué dices? ¿Que no es TuruleTA? ¿Pero cómo va a ser TuruleCA? Ni de coña. No. Negación.
Cuando creía que me había recuperado de que en España antes no se quitara la custodia a los padres por hacer fregar a las niñas y no llevarlas al colegio resulta que me dan en toda la cresta (nunca mejor dicho) con el nombre de la gallinita de marras. Pues me hago fan de Coco-GuaGua, espera, no, que esta pobre fue abandonada por su madre así de un día para otro. Se me ocurrió cantarle la canción a mi hija una vez: los lagrimones que le cayeron de inmediato nada más oír lo de "cuando era pequeña su mamá se fue y ella muy solita se quedó" han hecho que odie a  Enrique  y  Ana  por el resto de mi vida por el mal rato que pasó mi pequeña. Ni disco, ni chino, ni fino, ni filipino. No los quiero oír nunca más.

Ay que ver lo que se raya esta mujer, diréis, y es que últimamente me ha dado por amasar y amasando se piensa mucho, y de todo. Hay quien prefiere correr, que dicen que también proporciona un tiempo muy agradable para pensar en las cosas de uno. Pero corriendo no se hacen estas maravillas. Se pone el culo duro, eso sí, pero eso ya no son maravillas, en mi caso serían milagros. Bueno, a lo que voy. Que últimamente me ha dado por hacer brioches. Es un tipo de masa que me encanta. Es ligera, suave, muy aromática. Hay que dedicarle su tiempo, para los levados, pero también para el amasado, para que se desarrolle correctamente el gluten y la masa sea lisa y elástica. Pero a pesar de la dedicación, es muy agradecida porque queda preciosa de cualquier manera que la presentes. Pero esto no es cualquier manera, esto es Fidias mismo reencarnado en una señora panadera rusa llamada Valentina Zurkan. Poned su nombre en Google y veréis qué maravillas se pueden hacer con una masa de brioche. Yo le he copiado esta forma que es una de las que me pareció menos complicada. En realidad consiste en cortar y enrollar por el sitio adecuado para que queden estos dibijos tan bonitos. Para la masa de brioche puedes utilizar la receta que quieras. Yo llevo una temporada probando recetas distintas y no conseguía dar con una cuya textura me convenciera hasta que, haciendo pequeñas variaciones y modificaciones he dado con ésta. Si tienes una que es tu favorita, adelante con ella. Yo pongo aquí la mia.

Ingredientes

• 525 grs de harina de fuerza
• 80 grs de azúcar
• 210 grs de leche (la mía semidesnatada)
• 20 grs de levadura prensada fresca de panadero
• 3 yemas de huevo
• 120 grs de mantequilla a temperatura ambiente, en punto pomada
• 1 cucharadita rasa de sal
• 40 grs de azúcar moreno
• 60 grs más de mantequilla fundida
• Otra yema de huevo para pintar el briooche antes de hornearlo

Preparación 
LA MASA

1. Calentamos la leche hasta que esté sólo tibia y echamos 3 cucharadas de esta leche tibia en un recipiente y disolvemos en ella la levadura con una pizca de azúcar. Removemos bien y reservamos unos 15 minutos. En este tiempo se irá activando la levadura.
2. En un bol grande echamos la harina, el azúcar, y la sal. Lo mezclamos bien y hacemos un hueco en el centro para dejar como un volcán.
3. En el centro del volcán echamos la leche, las yemas batidas y la mezcla de levadura que teníamos activando.
4. Vamos mezclando añadiendo desde el exterior al interior para ir incorporando los elementos secos a los húmedos. Lo integramos con una cuchara de madera y cuando esté integrado ya empezamos a amasar con las manos.
5. Vamos incorporando a pedacitos la mantequilla a medida que vamos amasando. Como un pedazo de unos 10 grs cada minuto de amasado o así. Al principio será una masa muy pegajosa y poco manejable pero el gluten se va desarrollando con el amasado y la textura de la masa va cambiando en nuestras manos. Tenemos que conseguir una masa que se despegue de las paredes del bol y que sea fina y elástica. Si queremos podemos sacarla a la encimera y seguir amasando sobre ella o podemos hacer todo el amasado en el bol. Las condiciones de humedad de cada casa y el tipo de harina influyen en lo pegajosa que sea la masa. Las hay que pueden necesitar un poquito más de harina para ser manejables, pero yo os recomendaría que fuerais pacientes y que amaséis bien antes de añadir más harina porque lo que parece inmanejable al principio a veces no lo es tanto tras 5 min de amasado. Yo amasé la mía durante unos 12 minutos y no añadi nada de harina.
6. Una vez lista la masa, la colocamos en un recipiente ligeramente engrasado y la cubrimos con papel film. La dejamos levar hasta que crezca al doble del volumen inicial. Yo la dejé 1h30 a temperatura ambiente en la cocina de mi casa en un día que hacía calor hasta que estuvo así.
   
7.  Ahora dividimos la masa en cuatro partes iguales y las extendemos con el rodillo.
8. Mezclamos la mantequilla fundida con el azúcar y con esta mezcla pintamos cada una de las planchas de masa y las vamos superponiendo. La última, la que queda encima del todo no la pintamos.
   

EL "ESCULPIDO"

1. En el centro de la pila de 4 discos de masa colocamos algo redondo que nos marque un círculo central. Yo puse un vaso. Y, con un cuchillo bien afilado, hacemos cortes como en la siguiente foto desde el centro hasta el extremo de la masa llegando hasta el final.
   
2. A continuación hacemos de nuevo otros cortes intercalados con los anteriores, pero esta vez desde el centro hacia el extremo de la masa pero sin llegar hasta el final. Lo veis en la foto?
   
3. Y ahora viene la madre del cordero. A ver si me sé explicar. De cada sector circular que tenemos, tomamos los extremos y simplemente hay que enrollarlos por debajo para sacarlos por la abertura que hemos hecho que no llega hasta el final. Se meten por debajo y se sacan de forma que salen de abajo a arriba. A ver si con la foto se ve más claro.
   
4. Ahora hay que ponerlo bonito y para eso vamos a marcar unas líneas en los extremos. Yo lo he hecho con la parte roma de la hoja del cuchillo.
   
5.  Ya lo tenemos. A continuación ya es dejarlo levar para que se hinche y se ponga aún más bonito y gordito. Yo lo dejé 2h pero puede que en menos tiempo lo tengáis. Yo es que me fui de paseo y ya lo terminé al volver.
   
6. Cuando haya levado, lo pintamos con la yema de huevo y ya está listo para el horno.
   
7. Lo horneamos en horno precalentado a 180º durante 25 minutos. Si vemos que se tuesta demasiado lo cubrimos con papel de aluminio. Yo tuve que cubrir el mío a los 17 min porque ya estaba muy doradito.
   
8. Y a disfrutarlo. Calentito o frío. Está muy muy bueno.

Cosas a tener en cuenta:
- como os dije en la receta del Roscón de Reyes, estas masas son muy ricas y muy delicadas pero aguantan mal el paso del tiempo. Está bueno en el día y al día siguiente si lo conserváis bien tapado. Yo lo dejo en un plato bien envuelto con papel film y aguanta bien bien dos días. Al tercero, si es que aún queda, ya está seco. Para mojar en leche está bien, pero claramente no es lo mismo.
- Podéis espolvorearlo con azúcar glas, es una delicia aún más dulce.
- La mezcla de azúcar y mantequilla derretida podéis aromatizarla con canela. Yo es que eso lo dejo para los Cinnamon Rolls. Otra opción es ralladura de naranja o limón.
- Las claras de huevo que os sobren con un huevo entero o dos más, son perfectos para una tortilla de patatas con menos grasas. Ya sabéis que #aquinosetiranada.

¡La madre que los parió! Que no se llamaba Coco-Guagua sino Co-co-UA. Entre turuleCA y esto ya no sé ni quién soy.