Cómo me maravilla que haya gente capaz de reproducir los colores de la realidad. Donde yo veo un amarillo bonito en un trigal, hay quien ve un amarillo más oscuro en unas zonas, más claro en otras, con destellos de espigas aún verdes, o blanco según sea la luz o la intensidad del viento. Hay quien ve los colores del trigal incluso de noche. Yo sólo veo un amarillo espectacular que me hace sentir bien mientras lo miro, pero que cuando dejo de mirar no soy capaz de reproducir. En cambio los grandes pintores tienen toda esa gama de colores en la cabeza, la saben reproducir y además saben hacer con ella que te traslades al trigal mismo con sólo mirar su obra. Y es que hay colores tan bonitos en la naturaleza.
Os voy a dejar una receta con frutas de verano que me ha dejado muy buen sabor de boca por lo rica que está y también por lo agradable a la vista. La he hecho con nectarinas amarillas, pero creo que habría sido incluso más bonita y delicada de aspecto con nectarinas blancas. Es una receta que podéis adaptar a cualquier fruta, pero no dejéis de probarla con las frutas tan coloridas que tenemos en verano. Con ciruelas, melocotones, albaricoques... estoy segura de que queda preciosa y está igual de buena.
Además tiene una gran ventaja: lo rústico está de moda. Y qué quiere decir? pues que cuanto menos perfecto quede, mejor. El vintage ha llegado a la cocina y la arruga es bella hasta en las masas, que para algo se llaman masas quebradas oiga.
Pues nada, no me enrollo y ahí va.
Ingredientes:
Para la masa
- 150 grs de harina
- 1 cucharada sopera de azúcar
- una pizca de sal
- 85 grs de mantequilla muy fría cortada en dados
- 4 cucharadas de agua helada
- 1 cucharada sopera de harina
- 2 cucharadas soperas de almendra molida
- 50 grs de azúcar
- dos nectarinas lavadas y cortadas en gajos finos, con la piel
- huevo batido para pintar
- sirope de arce o mermelada o mantequilla fundida para pincelar
- Preparar la masa. Estoy muy obsesionada con las masas quebradas, ya las habéis visto en un par de recetas, así que sigo intentando perfeccionar la técnica para que salga lo más crujiente posible. En mis últimas pruebas he optado por seguir los pasos siguientes que son los que he visto en esta web de culto para los aficionados como yo a la repostería Joy of Baking.com:
- Poner la harina, el azúcar, y la sal en un robot de cocina y darle un par de pulsaciones para que quede bien mezclado. Esto es el equivalente a tamizarlo todo junto a mano.
- Añadir la mantequilla y darle otro par de pulsaciones al turbo si lo haces en el robot de cocina. Si lo haces a mano mezclar la harina con los cubos de mantequilla con dos tenedores, como intentando desmenuzar la harina. En ambos casos hay que conseguir que se quede como una arena gruesa. Si hay trozos de mantequilla del tamaño de un guisante sin deshacerse, vamos bien. Si vemos que se nos calienta y se deshace la mantequilla, lo metemos todo 15 min a la nevera, pero si trabajamos rápido no se deshará.
- La masa ya está conseguida. Una masa quebrada es una mezcla de mantequilla y harina, con o sin azúcar dependiendo del uso que le queramos dar. Pero como queda así arenosa es difícil de manipular. Es por esto que se le agrega un poco de agua. Así que vamos a ir añadiendo cucharadas de agua helada hasta que al apretar un poco la masa vemos que ya se amalgama. Sólo hasta aquí. Recuerda que la única misión del agua es conseguir que la masa se compacte un poco. Así que añadimos dos cucharadas de agua y le damos un par de pulsaciones al robot. Probamos a pellizcar la masa y si aún no se compacta, añadimos cucharadas de agua de una en una y vamos probando. Si lo haces a mano, es lo mismo: añadir agua y mezclar con una cuchara de madera o los tenedores hasta alcanzar la consistencia que buscamos.
- Cuando la tengamos, la compactamos bien y la aplastamos para formar un disco que meteremos en la nevera unos 30 min.
- Transcurrido el tiempo sacamos de la nevera, colocamos el disco entre dos papeles de horno y estiramos con el rodillo dándole forma redonda y dejándola finita.
- Ya ponemos a precalentar el horno a 200º
- Quitamos el papel de cocina de encima y traspasamos la masa con el papel de abajo directamente sobre la bandeja del horno, no necesitamos molde para esta tarta.
- Para el relleno mezclamos la almendra molida, el azúcar y la harina en un cuenco.
- Espolvoreamos con esta mezcla la base de masa que tenemos ya estirada sobre la bandeja de horno sin llegar a cubrir el disco de masa hasta el borde porque luego tendremos que plegar la masa hacia adentro y sin gastar toda la mezcla. Nos guardamos un par de cucharaditas para espolvorear al final sobre la fruta.
- Colocamos los gajitos de nectarina haciendo espiral o con la disposición que más nos guste.
- Espolvoreamos la fruta con la mezcla sobrante de almendra, harina y azúcar.
- Plegamos todo el perímetro de masa que queda sobre la fruta. Es importante sellar bien pellizcando si se nos hacen grietas en la masa para que no se escape líquido de la fruta.
- Pincelamos con huevo batido la masa.
- Horneamos en la parte más baja del horno hasta que esté dorada. La mía tardó unos 30 min.
- Al sacar del horno, podemos pincelar la fruta con mantequilla fundida, con mermelada de melocotón o albaricoque o con sirope de arce que es lo que hice yo. Esto es para que brille un poco y le dé un extra de dulzor pero es totalmente opcional.
- Está rica caliente, tibia o fría. Servida tibia con helado de vainilla me parece que tiene que estar muy buena.
- si dejas la masa finita, se desmorona con facilidad una vez horneada, así que ayúdate siempre del papel si la quieres trasladar a un plato o una fuente de servir o un soporte para tartas.
Premio para el que adivine cuál de estas dos imágenes muestra al verdadero ARTISTA en su estudio (Imagen dcha: El pintor en su estudio - Rembrandt) |
Me enchifla! otra que te copio en versión apta para diabéticos! MJ
ResponderEliminarEs verdad! Esta con el edulcorante en polvo tiene que salir muy bien. Tienes que decirme cuál usas tú (stevia?) porque sólo tengo natreen líquido y no queda bien cuando quieres conseguir un efecto así un poco caramelizado. Eres mi más fiel seguidora. MUA
EliminarUna galette espectacular.
ResponderEliminarbesos
Hola, Bea!
ResponderEliminarEste finde es cuando he hecho esta receta. Quedó perfecta! Estoy alucinando a toda mi familia con mis dotes culinarias, jajajaja.
Bueno, la masa la compré... ;)
Muchos besos, Marga