Tarta de chocolate con chocolate y trufas de chocolate

Un día, hace décadas, cuando yo tendría como 7-8 años estábamos sentados a la fresca en la puerta de una casa de pueblo en el que solíamos veranear cuando un niño pasó merendándose un bocadillo de esos de pan-pan con tremendo apetito, y alguien le gritó: ¡vaya bocata que te estás metiendo p’al cuerpo! ¿de qué es? Y el niño respondió: bocata de croquetas. En ese momento nada me pareció más redundante y más pan  con  pan  que un bocata de croquetas. Sin embargo pensé que tenía que estar riquísimo. Con las croquetas de mi madre más. Así que desde entonces no tengo prejuicios hacia el pan con pan. Y por ende, tampoco los tengo hacia el chocolate con chocolate. ¿Para qué mezclarlo con otra cosa si mezclado con él mismo es como mejor está? Este mes, en el reto ¡Qué Rico, Mami!, el blog Mis Dulces Joyas nos ha propuesto preparar una tarta festiva y original para las fiestas de los niños... Esta es la mía.

Es una tarta de chocolate, con bizcocho de chocolate, relleno de ganache de chocolate y adornado con trufas de chocolate. Sólo con el pringue que se organiza comiéndolo ya es festiva hasta más no poder. No veáis qué fiestas y qué aspavientos por la casa al grito de

¡No me pongas las manos en el sofaaa!
No te limpies en el vestido!
¡La pared! ¡No te apoyes en la pared con esas manos!

Ha generado tanto jaleo esta tarta en mi casa que si la llego a hacer para un cumpleaños habría parecido que estábamos celebrándolo en el plató de Sálvame.

Eso por no hablar de que no es una tarta light  precisamente. La propuesta era algo festivo ¿no? Pues no íbamos a hacer la tarta de lechuga. Una tartaca bien cargada de calorías de vez en cuando también sienta bien (aunque no hay que abusar).
Ya que se trataba de una bomba calórica y que el sabor era muy intenso a chocolate, no la hice muy grande. Las fotos se corresponden con un molde desmoldable de 15cm. Aún así sale una buena tarta porque entre que es altita y que con las trufas lleva un buen complemento, con un trozo no muy grande y una trufa se tiene una estupenda ración. Pero de verdad os diré que todo el estrés-anti-manchas y toda la dieta-al-carajo merecen mucho, muchísimo la pena. No sabéis lo rica que está. Y además me pareció que para las enanas podía resultar divertido meter mano en la tarta e ir quitándole trozos comiéndose las trufas antes de meterle el cuchillo. Y no me equivoqué porque se lanzaron rápidamente a por ellas.
Como no tengo demasiada experiencia con este tipo de tartas de pisos (layer-cakes  para los iniciados) opté por adornar toda la superficie para tapar imperfecciones en la cobertura. No suelo hacer estas tartas porque el relleno que mejor aguanta y la cobertura que mejor se trabaja y que da unos resultados muy espectaculares suele ser una crema de mantequilla y no me gusta mucho. Pero así con el chocolate la verdad es que va a ser cuestión de repetirla para ir perfeccionando la técnica... Sólo me hace falta perfeccionar antes la técnica de encontrar quién se las vaya comiendo, porque si no el que va a acaber con una técnica de lo más perfeccionada va a ser el que me haga una liposucción detrás de otra.
Voy dejaros la receta por si os animáis (a lo de la liposucción no! que tiene pinta de doler)

Ingredientes
PARA EL BIZCOCHO

• 75 grs de chocolate para fundir (tipo Nestlé postres, yo usé uno negro de Valor)
• 200 grs de azúcar blanquilla
• 125 grs de leche (la mía semidesnatada)
• 125 grs de mantequilla
• 100 grs de harina de repostería (yo usé bizcochona por lo que no añadí levadura, si usas harina de repostería normal, hay que poner además el medio sobre de levadura que indico a continuación)
• medio sobre de levadura química en polvo (Royal)
• 50 grs de cacaco en polvo sin azúcar (yo uso Valor)
• 1 pizca de sal
• 2 huevos pequeños

PARA LA GANACHE DE CHOCOLATE y LAS TRUFAS

• 350 grs de chocolate para fundir
• 250 grs de nata líquida con 35% m.g.

PARA DECORAR (opcional)

• almendra laminada
• cacao en polvo
• trufas

Preparación

El bizcocho

1. Precalentar el horno a 160º
2. En un cazo pequeño ponemos la mantequilla, el chocolate para fundir, la leche y el azúcar. Lo calentamos hasta que se vaya derritiendo todo pero sin que llegue a hervir. Lo mezclamos bien y lo dejamos que se entibie durante unos 10 min.
3. En un bol ponemos la harina con la levadura, el cacao en polvo, y la sal. 
4. Le añadimos a continuación los huevos ligeramente batidos y por último la mezcla inicial de chocolate entibiada (la del punto1.) y mezclamos bien hasta tener una mezcla lisita, homogénea y sin grumos.
5. Lo echamos en un molde desmoldable engrasado y con la base cubierta con papel sulfurizado y lo horneamos a 160º durante 1 hora (hacer la prueba de insertar una brocheta en el centro para ver si sale limpia).
6. Una vez horneado dejamos enfriar completamente y luego lo cortamos en dos o tres capas más o menos del mismo grosor. Yo envuelvo cada capa en papel film y las dejo reposar en la nevera hasta el día siguiente. Así la miga se pone más firme y la tarta se ensambla mejor.

La ganache

1. Ponemos la nata en un cazo que calentaremos hasta que casi hierva pero sin que llegue a hervir. Lo retiramos del fuego y añadimos el chocolate troceado y removemos hasta que se disuelva completamente. 
2. Dejamos la ganache enfriar toda la noche a temperatura ambiente para que adquiera consistencia. La consistencia que queremos es espesa. Si hace fresco en la cocina espesará más pero si hace mucho calor lo hará menos por lo que tal vez necesites meterla unos 10 min en el frigorífico antes de usarla. 

Montaje

1. Colocamos una capa del bizcocho como base y echamos como dos cucharadas generosas de ganache. No importa que rebose un poco, luego lo usaremos para cubrir por el exterior.
2. Colocamos otra capa y repetimos los pasos del punto 1. y finalmente colocamos la capa superior y terminamos de cubrir bien con la ganache por encima y por toda la superficie alrededor.
3. Decoramos con el chocolate en polvo y con la almendra laminada.
4. Con la ganache que sobra hacemos las trufas. Necesitaremos que esté más consistente para poder darles forma así que metemos la ganache en la nevera un rato. Hacemos bolitas, las pasamos por cacao en polvo y las ponemos adornando la superficie de la tarta. 

Cosas a tener en cuenta:
- es importante hornear a 160º en vez de a los habituales 180º ya que es lo que nos proporcionará un bizcocho planito, sin abombamientos, que son muy monos pero que no vienen bien cuando queremos hacer bizcochos de capas. Esos 20º menos de temperatura harán que el horneado sea más lento y el bizcocho no se hinchará tan rápido por el centro.
- La tarta se puede guardar en la nevera, se conserva estupendamente tapada y es mejor para mantener las trufas duritas porque si hace mucho calor en seguida se ablandan.
- Si sois muchos se pueden duplicar las cantidades y utilizar un molde de 26 cm.
- En vez de almendra laminada se puede usar crocanti, o no poner nada.

Como cada mes, no olvidéis pasaros a ver las propuestas de mis compis de ¡Qué rico, Mami!, seguro que son inspiradoras a tope

Y aunque este blog es alegre y esto va de niños felices comiendo tarta, no quiero que nos olvidemos de los niños para los que no es todo tan fácil ni tan festivo. Hay veces que el pan con pan no es un bocadillo de croquetas, ni es algo elegido sino una imposición sobrevenida por las circunstancias. Recordemos a aquellos niños que se tienen que comer el bocadillo mágico de pan con pan y a esas madres que hacen esa magia para que los niños coman algo sin dejar de ser niños. Y tengamos en cuenta que muchas veces nos quejamos de vicio.

El bocadillo mágico